Allí, integrantes de Madres de Plaza de Mayo-Línea Fundadora descubrieron la placa colocada sobre una cartelera cuya leyenda dice: “Bosque de la Memoria Viva 30 de Agosto: Día del Desaparecido” y plantaron cinco acacias blancas como símbolo del mensaje que han venido difundiendo desde siempre.

Estuvieron presentes el presidente del Concejo Deliberante, Ariel Ciano; la secretaria del Cuerpo Deliberativo, María Eugenia Dicándilo; los concejales Javier Woollands, Marisa Vargas y Leandro Laserna (AM) y Verónica Beresiarte (FpV); la directora de la Oficina de Derechos Humanos, Agustina Palacios; la subsecretaria de Políticas Institucionales, Alejandra Urdampilleta; el coordinador de Protección Ciudadana, César Ventimiglia; integrantes de la agrupación HIJOS e invitados especiales.

“Con la Comisión Permanente por la Memoria hemos acordado revitalizar este espacio y convenimos hacerlo ahora. Los pueblos que no tienen memoria o caen en el olvido corren el riesgo de repetir su historia que, en nuestro caso, sería la última dictadura cívico-militar. Las Madres de Plaza de Mayo son el ejemplo de la búsqueda permanente e inagotable de la verdad, de la lucha, del esfuerzo y el reclamo de justicia. Ahora, gracias a ellas, se sabe qué pasó y hay procedimientos judiciales con condenas”, señaló Ciano. “Son un orgullo de nuestra comunidad, ejemplo de una sociedad que aspiramos que sea justa y que ofrezca igualdad de oportunidades”, añadió.

El Presidente del Corporación Deliberativa no obvió mencionar que “las Abuelas también son ejemplo por su incansable reclamo en épocas en que las instituciones del Estado las ignoraron y les cerraron las puertas. Su tolerancia es una muestra más de civismo y actitud democrática”.

Por su parte, María Juana Rivas, integrante de Madres de Plaza de Mayo-Línea Fundadora, recordó el momento en que visitó por primera vez el sitio donde finalmente fue emplazado el Bosque de la Memoria Viva. “Es un lugar sagrado –evocó-. Acá descansan las cenizas de César Mora, padre de Plaza de Mayo”.

A continuación, las Madres –entre las que también estuvieron Isabel Sáenz, Elsa Vera y María Luisa Corlatti, plantaron cinco acacias blancas en un sector del Bosque, donde ya habían sido colocadas más de 40. Representan el simbolismo de echar raíces para hacer crecer la memoria y la lucha, un ejemplo que han predicado siempre las agrupaciones de derechos humanos.

De esta manera, durante una mañana ventosa y algo fría se desarrolló un acto con un mensaje explicitado en el nombre del lugar donde fue realizado: Mantener viva la memoria.

El homenaje realizado en el Bosque de la Memoria forma parte de un cronograma de acontecimientos conmemorativos con relación al 36º aniversario del último Golpe de Estado, que instauró la última dictadura cívico-militar. En este contexto, el Concejo Deliberante llevará a cabo una Sesión Pública Especial, que tendrá lugar este sábado 24 de marzo, a partir de las 10.