Hechos violentos ocurridos en los últimos meses generaron complicaciones en el centro de salud ubicado en la sede de la Asociación Pro Ayuda a La Niñez Desamparada (Apand) del barrio Los Pinares.

"Pedimos presencia policial para que esté de guardia en la salita todos los días. Los médicos necesitan protección porque viene gente a agredirlos y no pueden ejercer su cargo con tranquilidad", detalló la vecina Yanina Contreras a Cazador de Noticias.

"Tenemos gente de todas las edades que está sin controlar, que necesita su medicación. Por ejemplo, hay chicas embarazadas que necesitan atención y un bebé que tiene 15 días y todavía no ha tenido sus controles por el cierre de la sala", agregó.

El inconveniente de la falta de seguridad contínua ha generado que desde hace dos semanas el lugar esté cerrado."Vino un jefe policial y nos prometió poner un policía todos los días pero nadie lo certificó. Queremos que nos den certezas", pidió Yanina.

Además, solicitaron asistencia al lugar de personal municipal para brindar explicaciones y posibles soluciones para el problema que afecta también a las familias del barrio Villa Primera.