El dirigente radical Ricardo Alfonsín reunió en el Club Español de CABA, a más de 400 dirigentes y militantes en un encuentro organizado por el Espacio de Pensamiento Alfonsinista, que nuclea a los alfonsinistas porteños y bonaerenses. Participaron del mismo, entre otros, los referentes Mario Rodríguez y Mario Raiteri.
Alfonsín señaló “la necesidad de poner en marcha un proceso de reflexión orientado a evaluar lo ocurrido durante estos 4 años”. Sostuvo que es “obvio que las cosas no salieron como los más entusiastas anticiparon en el 2015. Salieron exactamente al revés. No podemos actuar como si nada hubiera ocurrido o como si todo hubiera salido tal cual estaba previsto. Sólo con un ejercicio autocrítico, sincero, podemos recuperar al partido. No podemos repetir lo hecho en estos años. Hay que hacer radicalismo defendiendo sus ideas, no sólo los cargos o lugares en las listas. No somos una herramienta electoral para la cual las ideas son un incidente. Antes que una herramienta electoral somos un sistema de ideas”.
Durante su discurso, el ex diputado nacional resaltó que “los que compartimos la mirada crítica respecto de estos años, debemos organizarnos para que no vuelva a ocurrir lo mismo. Hay cada vez más radicales que comprenden que no podemos tropezarnos otra vez con la misma piedra y están dispuestos a pelear en todas y cada una de las provincias y en todos y cada uno de los municipios, hay vida después de Cambiemos”.
En una reunión en la que además de “ordenar la tropa propia”, envió un mensaje muy fuerte hacia adentro del centenario partido, remarcó que en estos 4 años “no gobernó Cambiemos ni gobernó la Unión Cívica Radical, gobernó el PRO. En su alocución remarcó “nosotros teníamos el derecho, incluso la obligación de tratar de influir en las decisiones que tomaba el PRO, respecto de los asuntos más trascendentes, para evitar que se cometieran errores. No lo hicimos. Y no porque no pudiéramos. Nadie nos lo impedía. Nosotros mismos nos colocamos en esa situación. Esa es la verdad”.
Por otra parte, el último candidato presidencial que tuvo la UCR, en un claro mensaje a quienes dentro de su partido niegan el debate ideológico e insisten en la alianza con el PRO, señaló que “la responsabilidad no es de Macri ni de Peña, sino de las políticas que implementaron. ¿O ustedes piensan que, con otras personas, las mismas políticas hubieran dado buen resultado?", preguntó a la audiencia.
También negó que fuera cuestión de tiempo para que las políticas aplicadas tuvieran éxito y que en el momento en que se estaban por recoger los frutos se hubiera acabado el mandato. En ese sentido afirmó que “de seguir más tiempo con las mismas políticas, se hubiera profundizado la crisis".
El dirigente radical bonaerense se mostró contrario a quienes actúan irresponsablemente ya que “de fracasar el nuevo gobierno, pueden ocurrir cosas muy graves, como la emergencia de liderazgos autoritarios que, en nombre de la solución de las angustias, ofrezcan sacrificar libertades. Es lo que está ocurriendo en muchos países del mundo, con este capitalismo salvaje y a social. Países subdesarrollados como nosotros tienen que apelar más al diálogo, mucho más de lo que apela la política en la Argentina, a los consensos, a las soluciones de compromiso, para encarar aquellos problemas que nos anclan en el subdesarrollo, que son de muy difícil resolución, y que hacen sufrir a muchísima gente. Hay que terminar con la grieta y la UCR tiene que ser un actor central a la hora de hacer docencia para que comprenda la sociedad que es muy difícil resolver sus problemas en una sociedad en la que sus dirigentes se relacionan de esta manera. La política dio lo mejor de sí en el mundo cuando fue capaz de enfrentar los problemas a través del consenso. A eso lo demuestra la historia” sostuvo Alfonsín.
Según comentaron los dirigentes presentes en el acto, como el ex Concejal Mario Rodríguez y el referente ruralista Mario Raiteri, Alfonsín dejó en claro que inicia un proceso interno y que no habrá mucho de descanso este verano, en el que buscará sumar voluntades detrás de un proyecto de renovación pero también de afirmación del ideario radical. "La renovación por la renovación, no sirve. La renovación debe ponerse al servicio de la razón de ser de la UCR", afirmó.
Alfonsín manifestó su intención de nuclear el ala progresista, no sólo en las recorridas por el país, sino en este reagrupamiento de fuerzas que logró en el Club Español con la presencia de más de 400 seguidores. En vistas a posibles futuros armados y en el marco del debate sobre las estrategias del partido, sostuvo que “deberíamos unirnos fuerzas que pensamos igual para competir contra las fuerzas que no piensan igual. No podemos repetir lo que hemos hecho: reunirnos los que pensamos distinto para competir contra los que piensan igual a nosotros”.