Solo una empresa se presentó este martes a la licitación nacional e internacional para concesionar el estadio José María Minella, el Polideportivo Islas Malvinas y los espacios comunes del Parque Municipal de los Deportes. Se trata de Minella Stadium S.A., una sociedad anónima creada en diciembre de 2024, lo que deja entrever que fue conformada específicamente para esta licitación.
La firma está presidida por Rafael Trevisán, de capitales brasileños, aunque tras bambalinas aparece la familia Ávila, históricamente ligada al negocio del fútbol argentino.
La licitación contempla una concesión por 30 años, con una opción de prórroga por otros 10. El canon será de $120 millones, se ajustará por inflación y deberá comenzar a pagarse tres años después de la firma del contrato. A cambio, la empresa deberá encarar un ambicioso plan de obras por más de 20 millones de dólares, que alcanzará tanto al Minella como al Polideportivo y el entorno del Parque de los Deportes.
Una cuestión a considerar es que, en caso de que el municipio acepte la propuesta de Minella Stadium S.A y decida adjudicar, el Concejo Deliberante deberá autorizarlo, ya que hubo una sola oferta. Así lo estipula la Ley Orgánica de las Municipalidades (LOM). De lo contrario, se deberá convocar a un segundo llamado a licitación.
“Si en las licitaciones realizadas con las formalidades de esta ley se registrara una sola oferta y ésta fuera de evidente conveniencia, la autoridad administrativa podrá resolver su aceptación con autorización del Concejo. En circunstancias distintas, el segundo llamado será procedente y obligatorio”, establece el artículo 155 de la LOM.
