La única iglesia católica de la Franja de Gaza fue alcanzada por un ataque que dejó dos muertos y cuatro personas heridas, entre ellas, el sacerdote argentino Gabriel Romanelli. La ministra italiana Giorgia Meloni responsabilizó a Israel y aseguró que la actitud es inaceptable.

El bombardeo impactó en la Iglesia de la Sagrada Familia, situada en el norte del enclave, según indicó el Patriarcado Latino de Jerusalén. La misma fuente reveló que murieron un hombre y una mujer, y que hay dos personas en estado crítico.

El párroco argentino sufrió lesiones y fue atendido en un centro de salud. Mantenía contacto con el papa Francisco y, en una entrevista en el programa 60 Minutes de la cadena CBS, reveló que llamaba cada día a las 19 para saber cómo estaban los refugiados en la iglesia.

La parroquia tiene a unos 500 cristianos desplazados que encontraron refugio luego de perder sus hogares a causa del conflicto. El comunicado indica que “las FDI están al tanto de los informes relativos a los daños causados a la Iglesia de la Sagrada Familia en la ciudad de Gaza y las víctimas en el lugar. Se están examinando las circunstancias del incidente”.

El ataque ocurrió en una zona que ya había sido castigada durante más de una semana. El director interino del centro de salud Al-Ahli, Fadel Naem, indicó que entre las personas heridas se encuentran un niño con discapacidad, dos mujeres y una persona mayor.

El hecho ocurrió a las 10:10 de la mañana cuando un tanque israelí disparó contra la parroquia. La primera ministra italiana, Giorgia Meloni, responsabilizó a Israel: “los ataques contra la población civil que Israel viene demostrando desde hace meses son inaceptables. Ninguna acción militar puede justificar tal actitud”.