Un equipo multidisciplinario del hospital Garrahan logró separar con éxito a dos gemelas siamesas de poco más de tres meses, Ámbar y Pilar, originarias de Rosario.
La intervención fue liderada por el doctor Víctor Ayarzábal, quien confirmó que las niñas podrán llevar una vida normal. La madre de las gemelas, Yamila, expresó su satisfacción: “Bendecidos, gracias a Dios. Siempre dejamos todo en las manos de Dios”.
Yamila, de 27 años, y su pareja Gonzalo, de 23, enfrentaron un proceso complicado desde el embarazo. “La realidad es que ya buscábamos hace un tiempo... pero me habían dicho que yo no podía tener bebés”, relató Yamila en Viva la Radio por Cadena 3 Rosario. Sin embargo, su fe la llevó a seguir adelante y finalmente quedó embarazada.
El diagnóstico de las gemelas como siamesas se reveló en las primeras ecografías. “Hubo momentos donde estuvimos mucho con nuestro corazón en la mano”, comentó Yamila. A pesar de la zozobra, decidieron seguir adelante con el embarazo, que inicialmente incluía un mellizo que no llegó a nacer.
Las gemelas nacieron en el Hospital Argerich y, tras su nacimiento, se programó la separación. Yamila detalló que “había muchas pautas por tomar” antes de la intervención, que se realizó cuando las niñas tenían 32 semanas de vida.
“El anhelo de nuestros corazones como papá y mamá siempre fue de poder alzarla aún de bebé”, agregó.
Las gemelas se encuentran en la unidad de neonatología, donde están en recuperación. “Ya nos sacaron el tubo... la meta es que puedan comenzar a tomar leche, que la toleren”, explicó Yamila. Actualmente, la familia se hospeda en la Casa de Ronald McDonald, un apoyo fundamental durante este proceso.
“Sin la ayuda de todo el mundo que nos ayudó, nosotros no hubiésemos podido”, concluyó Yamila.
El caso de Ámbar y Pilar no solo es un hito médico, sino también un testimonio de fe y resiliencia familiar en momentos críticos. La comunidad sigue atenta al progreso de las gemelas, que simbolizan la esperanza y la vida.
